La música, o Mozart





Mozart - Piano Concerto nº 21 in C pour J-Marc por siouxnavajo



   De todas la expresiones artísticas que conozco, la música quizá, sea la forma más sublime de alcanzar un estado físico y mental, que supera con creces al resto.
La literatura, alimenta espíritu y mente así como empuja al crecimiento (siempre en todas direcciones) del ser; y es mágica pues de postre, te da la ensoñación; pero no todo el mundo lee, no todo el mundo tiene a su alcance un buen libro...no todo el mundo, puede leer en un idioma que no sea el suyo, y aun leyendo, no es seguro que comprenda.
   La pintura, exquisito fotograma deteniendo el tiempo, es una invitación a la mesa de un buffet abierto todo el día, todo el año...y siempre zarandea al nervio óptico. Visitar un museo y contemplar los grandes lienzos de los grandes maestros, es como viajar a través del tiempo por un mundo solitario, vacío para ti, con la posibilidad de moverte a delante, y atrás en el tiempo y encajar esos fotogramas en una gran película sencillamente genial. Pero la música, la gran música o el genio de Mozart, me supera.




   Cierto es que no todo el mundo escucha música, la misma música o puede no entenderla; pero frente al resto de las demás formas de expresión artística, la música si es universal; no necesita de traducción...sólo oírla y decidir qué te agrada, qué no, o por qué este tema y no aquel te parece más interesante.
   Todo esto no es fruto sino de una reflexión, no es gratuita mi exposición. Al menos, a mí me parece que esto es así (...) Mozart y su música representaría algo así como un universo, como un big-bang en su época, que se expande hasta nosotros y continúa; y no es mejor o peor que otros compositores o artistas, simplemente es el que elegí para el alimento de mi alma, que aunque no existiera como tal, sería otra cosa. Par mí, representa la máxima expresión y como ejemplo, su Requiem kv 626.
   ¿Qué puede representar un apuesta de sol en el horizonte amazónico para un yanomami...? supongo que de igual manera para ese ser anónimo perdido en un punto casi infinito de la selva, sería algo así; saber que día tras día puede contemplar esa maravilla, tal vez desconocida para él, mientras marcha fuera de su chapono para ausentarse por un período más o menos breve, e ir de caza...y volviendo al poblado, será igualmente feliz; para ello no habrá hecho falta que escuche el Requiem de Mozart, simplemente para él, esto no existe; no existe más arte que su concepto de la caza o la puesta de sol, y ni siquiera, esto será cierto para él ya que sus valores, pueden estar situados en otra frontera diferente de occidente. Todo esto, no es que sea verdad. Pero es mi verdad.






Esta música, la produce la naturaleza; las imágenes, una visión particular

   ¿Qué es la música? ¿Produce la naturaleza sonidos que podrían denominarse música? Creo que sí; por música podría denominarse de forma académica como: "La secuencia de sonidos en orden ascendente y descendente, ordenados en el espacio y en el tiempo, así como susceptible de ser agradable para el oído". Esto se cumple en mi percepción porque además, se acompaña de imágenes que de alguna forma, se relacionan con "éste" sonido musical-natural. A veces sucede, que observando unas imágenes, sin querer o queriendo, le "añadimos" música mentalmente; es como si quisiéramos atrapar ese momento como en un formato, que al oír de nuevo esa música, nos evoque esas imágenes que por alguna u otra razón, nos ha emocionado. Igualmente podría hacerse a la inversa; es decir, al sonido único de las olas del mar, ponerle imágenes de las que acordarte de ellas, siempre que oigas una ola cerca de ti.





...Siguiendo a Mozart
   
   Si Dios existiera, no se cansaría de escucharla, si la perfección fuese posible, esta obra, como es el Requiem, lo alcanzaría; esta interpretación de Karl Böhm, tocaría la perfección con su batuta...yo, creo que existo y no me canso de oírla, mas creo que la perfección no existe; pero pienso como Einstein sobre la figura  de Mozart: "Beethoven, a veces toca el cielo; pero Mozart, vive en él". Aun pensando que no existe el cielo, creo que Einstein, tenía razón.


Mozart Vs. Mozart


   Encuentro a Mozart, enfrentándose a sí mismo en este tema que sin duda, compuso para su gozo y para verse frente a frente con el genio. Sólo con escuchar el amplísimo repertorio que compuso, te atreves a pensar que de entre todas las obras, esta es una de ellas; aquí lo veo frente al piano, en  absoluta soledad, por la tarde y abstraído del ruido de la calle. En los primeros acordes, nos dice que va a comenzar la lucha, cara a cara consigo mismo. En esos momentos se duplica y se supera para ir avanzando tecla a tecla, hasta encontrar una que ni él mismo espera; esa sorpresa, es su fantasía y el mismo Mozart, el otro, le responde con otros acordes más diversos y cristalinos... se relaja y cree haberse encontrado en esos primeros compases, pero aparece de nuevo el primero, el Mozart juguetón y hábil y le contesta con una melodía graciosa, retando de nuevo al segundo...variaciones incluidas, y le deja el guante de nuevo a su contrincante. Una maravilla que va  "In crescendo" hasta que ya no se reconocen el uno del otro y entran en la tesitura de mejorarse, de saber quién de ellos, es el autor de esta música que inunda por siempre el cosmos, y con ello, también el caos. Variación tras variación vuelven al comienzo y como en un estado febril, la música es interpretada por ella misma, por la música en sí; ya no está Mozart, ya no están los gemelos luchando entre sí, ahora es la magia la que consigue los sonidos y en el papel pautado, limpio y sin tachones queda impresa esta obra de arte. Anochece en Viena un 20 de mayo de 1785. 





El influjo de Mozart 
   Me encuentro entre los seguidores incondicionales de este singular compositor, y aunque lo hago desde muy joven, creo que por pertenecer a una generación en la que sólo disponíamos en casa de una radio antigua de lámparas, y donde oíamos música folclórica de la zona, radionovelas y poco más, tardó algo más en llegar la música clásica a mis pequeños oídos. No existían aún los aparatos modernos como el radio-cassette (que ahora es antiquísimo, pero no así en los años 80, cuando por fin pude disponer de uno o más,  y cuando entonces, había pasado más de una década desde esa radio de lámparas); o el gran invento del "giradiscos"; que aunque creo que éste sí estaba en el mercado, ni por asomo habría llegado a casa por motivos (entre otros) económicos. Pero por fortuna, siempre se colaba algún tema de música clásica y despertó en mí, cierta y entrañable curiosidad. Se activaba algún misterioso mecanismo en la radio, o alguna mano invisible sintonizaba alguna de las cientos de cadenas que esas radios de los años 60, eran capaces de captar. Lo que no sería, es la casualidad; de eso estoy seguro.


    Pasó tiempo hasta que tuve edad de hacerme con algunos cassettes y algún disco de vinilo en unos grandes almacenes ( desaparecidos hoy día) ...mis primeras obras clásicas fueron las sinfonías de L. Van Beethoven y algunos vinilos de W. A. Mozart. Y esto lo hice, pese a no disponer ni de reproductor de cassettes, ni plato giradiscos. Sabía que tarde o temprano, dispondría de ellos. Eso era lo que les comentaba a mis amigos cuando me preguntaban por qué tenía esta música enlatada en esos formatos, si no disponía de aparatos que la pudiesen reproducir.


   Inclusive tuve la gran suerte de tener maestros en mi humilde colegio, que se preocupaban de temas culturales y en las horas de música (que entonces existía la materia, como ahora), lejos de hacer como la gran mayoría, que era dedicar el tiempo a cualquier tarea menos aprender música, entonces; como digo, mi maestro Don Antonio, cargaba con su aparato tocadiscos desde su casa (el colegio no disponía de tal artefacto) y nos sorprendía con la música "culta"...recuerdo los grandes temas de Beethoven, Mozart, Haydn o Verdi...siempre le estaré agradecido, pues con su empeño en que aprendiésemos música (también nos impartía clases teóricas y prácticas, con su vieja guitarra...) consiguió acrecentar más aún, el interés que ya entonces tenía por este maravilloso formato artístico.
  
   Por suerte, el tiempo ha transcurrido y con él, los avances tecnológicos y lo que es más importante; el acceso a esta tecnología por la situación socio-económica actual, que hace posible escuchar música desde cualquier lugar, en cualquier momento y con formatos, que en mi etapa infantil, jamás hubiésemos sospechado.
   Ahora cuando entramos en el coche para hacer aunque sea, un viaje corto, Pablo me dice: papá, pon algo de Mozart...



   Pablo hace una imitación del primer movimiento, de la pequeña serenata nocturna del genial compositor. Lógicamente, es su versión particular cuando a penas tenía cuatro años de edad. Sólo por esta imitación, merece la pena que siga oyendo música y sobretodo, la música que él elija; que será muy parecida a la que oímos nosotros, sus padres, pues es lo que le ofrecemos, entre otras muchísimas cosas. 



8 comentarios:

  1. Me gusta tu reflexión y, la verdad, es que siempre he pensado que si hay alguien que puede tocar el cielo o incluso vivir en él, son los ARTISTAS, así, con mayúsculas.Probablemente el cielo esté poblado de pintores, escritores, músicos que igual alguna vez se inspiran en nuestras vidas sencillas y terrenas.

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  2. Al menos, en nuestra memoria, pueden hacerlo; y esto es mucho, Por suerte el hombre, el "Íntegro" ha inventado formas con las cuales podemos acercarnos a estos genios y que no voy a enumerar por obvias. Luego está lo más importante: la memoria y el reconocimiento de estas obras de arte tanto en música, literatura, pintura etc. Y cuando digo la memoria, lo englobo todo pues creo que el hombre vive en una realidad que cree manejar y esto no es del todo cierto pues sin memoria, no somos nadie. Gracias por tu comentario.

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  3. Como lo prometido es deuda, aquí paso a comentar tu especial sobre Mozart.
    Sin duda alguna, Mozart es tu debilidad. Además, se nota que conoces a fondo su magnífica y extensa obra y para entenderla y contagiar tu pasión por ella, tu formación musical ha tenido que influir sobremanera. Estamos de acuerdo en que Mozart será siempre uno de los más grandes genios de la música y también coincido contigo en que esa "lacrimosa" es de lo más sublime que un ser humano pueda componer ... o disfrutar con eso que llamo la contemplación de la Belleza. Recuerdo todavía la primera vez que la escuché y las inefables sensaciones que me produjo. Difícil de olvidar.
    Luego está esa Fantasía K475 .... que me ha pasado por encima como un tren expreso. Tus comentarios sobre la misma ya lo creo que ayudan a advertir lo que se nos pueda escapar a los que no somos grandes conocedores del genio mozartiano. Agradezco, por tanto, tu comentario.
    Y lo de tu hijo, simplemente enternecedor. Me ha arrancado una gran sonrisa.
    No te equivocabas, me ha gustado tu entrada.

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  4. Muchas gracias, se me había pasado responder a este comentario...veo que realmente te ha gustado la página; y lo digo porque aprecio en tu comentario sinceridad. Pero tratándose de la música de Mozart, es difícil que a una persona culta e inteligente, no pueda agradarle; aunque no conozca en demasía su vida y obra. Es justo decirlo pues por desgracia, no a todo el mundo le gusta la "clásica" (mal denominada así pues se "mete" en el saco a compositores que nada o muy poco tiene que ver con la época o el estilo) y no son pocos los conocidos que te miran como a un bicho raro, por el simple hecho de gustarte este tipo de música, si encima reconoces que además, te gusta el jazz, o el pop o cientos de estilos musicales más...pero bueno, aunque esté mal dicho, como una vez le comenté a un compañero de trabajo que se "reía" de mis gustos musicales, no está hecho el chocolate para el burro...
    Gracias y seguiré ampliando lo que me permita mi conocimiento (bastante normalito) y mi memoria ( he leído varias biografías del genial compositor...) que esa, si es un poco cajón de sastre.

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  5. A la espera estaré de otros especiales sobre música que elabores con tal esmero.
    Por respeto y para que más o menos te hagas una idea de con quién hablas cuando ves lo de Gilgamesh, te diré que tengo 47 años y vivo en Fuengirola (Málaga). Así ya no te seré un perfecto desconocido.

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  6. Bueno, encantado gilgamesh, es curioso pues yo tengo 47, y soy de Jaén...así que bienvenido al club de los "casi cincuenta"...
    No me importaba que hicieses comentarios en absoluto ni antes, ni ahora...por supuesto que estoy encantado y, ahora que sé algo más, mejor aún.
    Estamos en contacto

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  7. Qué curioso, Jaén. ¿Te acuerdas que te comenté que había visto en vivo a ese tenor, Juan Diego Florez? pues una de ellas fue en el recién inaugurado Teatro Infanta Leonor de Jaén. Hace unos años. Recuerdo que fuimos un grupo de amigos amantes de la ópera y volvimos el mismo día después de la función. Una gozada, aunque Florez no estuviese especialmente brillante esa noche.
    Pues nada, somos casi vecinos. Conozco Jaén, sobre todo de Jaén hacia abajo: Torredelcampo, Martos,Torredonjimeno,Alcaudete etc etc.

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  8. POR SI TU PELO


    Por si tu pelo busco en las venas

    como una mina por si tu pelo,

    como un misterio, como asombrado.

    Por si tu pelo me hago de sangre,

    me hago de nieve por si tu pelo,

    me hago fantasma, voraz, ardiente,

    por si tu pelo miro a lo lejos,

    al horizonte por si tu pelo.

    Cuento batallas no consumadas,

    canto canciones por si tu pelo,

    busco en la hierba, dejo las uñas,

    saco los ojos por si tu pelo.

    Planto semillas, sudor salobre,

    llanto de niño por si tu pelo.

    Por si tu pelo me hurgo la herida,

    sueño contigo por si tu pelo,

    me agarro fuerte por si tu pelo,

    pasa un caballo trotando al viento

    comiendo nubes por si tu pelo.

    Grabo tu nombre por si tu pelo,

    me siento libre por si tu pelo,

    monto una historia de amor y muerte,

    de lucha franca por si tu pelo,

    de miel bajando por las mejillas,

    de negro y blanco por si tu pelo,

    de darlo todo, final incierto,

    ventana abierta por si tu pelo,

    llama latiendo por si tu pelo,

    juego de manos por si tu pelo.

    Canta un jilguero desde la rama,

    crece una mata por si tu pelo,

    nace una aurora por si tu pelo,

    por si tu pelo muere una estrella

    buscando pistas por si tu pelo,

    perdiendo puntas por si tu pelo,

    pidiendo ayuda por si tu pelo.

    Por si tu pelo la mar en calma

    trama tormentas por si tu pelo,

    por si tu pelo convoca y gime,

    rompe en la orilla por si tu pelo.

    Doblan su ritmo las caracolas,

    doblan su ritmo por si tu pelo,

    por si tu pelo peces desnudos

    juntan escamas por si tu pelo.

    Aquí mirando pero mirando

    bajo las piedras por si tu pelo,

    cedo los brazos, rendidos, yertos,

    crucificados por si tu pelo.

    Jose Miguel Junco Ezquerra

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